Siempre nos han dicho que practicar ejercicio es sano cuerpo.
Hacer ejercicio activa el sistema circulatorio, tonifica el sistema muscular, limpia el cuerpo de tóxicos a través del sudor y hace que segreguemos endorfinas que ejercen de neurotransmisores y son las encargadas de para nuestro
hacer sentirnos bien con nosotros mismos durante y después de nuestro entrenamiento. Por eso se dice que la práctica del ejercicio ayuda a las personas que sufren de depresión.
El ejercicio no sólo nos hace sentirnos bien, si no que es uno de los mejores analgésicos naturales contra el dolor. Las endorfinas son sustancias químicas segregadas por el organismo que actúan como receptores específicos en el cerebro para mediar en distintos procesos que intervienen en la percepción del dolor. Es por eso que después de practicar ejercicio la persona siente que el dolor disminuye o desaparece durante un tiempo.
Esto es perfecto cuando se practica ejercicio de intensidad moderada, pero cuando realizamos un deporte competitivo tenemos que saber que posiblemente si no cuidamos nuestro cuerpo, con el paso del tiempo vamos a pagar un peaje que nos costará parte de nuestra salud física primero y seguidamente la psíquica por no poder alcanzar los objetivos marcados en el tiempo.
¿Cuántos deportista en un momento determinado no se han encontrado que más entrenamiento = menos rendimiento?
Si, muchos deportistas famosos y no famosos. Da igual que deportes practiques, el resultado del exceso de esfuerzo del cuerpo siempre es el mismo. ¡TENER QUE PARAR PARA RECUPERAR!
Nuestro cuerpo es la herramienta o la máquina que utilizamos para realizar esa actividad que nos produce grandes satisfacciones cuando conseguimos nuestros propósitos, ya sean competitivos, físicos o económicos. Sí, ¿es que el trabajo excesivo no nos carga de estrés?, nos produce dolor de espalda, ¿de cabeza…?, pero a veces podemos creer que valió la pena a final de mes. Pero eso es otro tema para otra ocasión.
Cuando realizamos ejercicio, ya sea moderado o competitivo, hay siempre que realizar después una recuperación y tonificación del cuerpo, tanto a nivel interno como muscular. Necesitamos suplementación alimenticia y relajar el sistema muscular con estiramientos, masaje… para recuperar el grupo muscular trabajado, evitando así el agotamiento del cuerpo.
Es muy importante acudir a un quiromasajista u otro profesional como osteópata fisioterapeuta del mundo del deporte que te ayude a mantener tus músculos sanos y así evitar futuras lesiones que te mantendrían alejado de la competición durante un periodo indeterminado de tiempo.
Los veneficios de un buen masaje muscular son muchos. Por ejemplo, mantendrás los músculos descontracturados y relajados, con buena circulación sanguínea que les aportarán una oxigenación optima a la zona tratada. Mantener las fibras musculares elásticas evitarán futuras roturas fibrilares y lesiones de los tendones como, tendinitis del tendón rotuliano entre otras. Otro de los problemas más comunes son las descompensaciones musculares que producen un desgaste articular como, por ejemplo, la condropatía rotuliana, lesión muy común entre los futbolistas o los ciclistas, ya que unos descompensan el vasto interno y otros el vasto externo. Por eso es importante una buena terapia muscular y un buen asesoramiento, control y tratamiento.
Con un tratamiento integrado dirigido a tratar el cuerpo tanto a nivel biomecánico y muscular, como nutricional a través de un buen terapeuta/ fisioterapeuta, osteópata … podrás encontrar el equilibrio entre el deporte y la salud deportiva física y mentalmente.