La acupuntura, una de las principales terapias de la Medicina Tradicional China (MTC), ha demostrado ser muy eficaz en el tratamiento de la fibromialgia y el dolor crónico. Junto con otras terapias y ciertos ajustes en la alimentación, muchas personas que padecen estas condiciones pueden experimentar una mejora significativa en su dolor y, lo más importante, recuperar una mejor calidad de vida.
¿Cómo Funciona la Acupuntura para la Fibromialgia y el Dolor Crónico?
La fibromialgia es un síndrome que se caracteriza por dolor generalizado, fatiga, trastornos del sueño y, a menudo, síntomas emocionales como la depresión. El tratamiento con acupuntura consiste en la inserción de finas agujas en puntos específicos del cuerpo, lo que se complementa con técnicas como el masaje terapéutico, la colocación de ventosas, la moxibustión y la electroestimulación. Estas técnicas se aplican siempre respetando la tolerancia del paciente al dolor, especialmente al inicio del tratamiento, ya que en estos casos buscamos trabajar con baja intensidad.
¿Por qué mejora el dolor?
La acupuntura tiene un potente efecto analgésico gracias a la liberación de endorfinas, los «analgésicos naturales» del cuerpo. Estas sustancias químicas ayudan a reducir la percepción del dolor y proporcionan un alivio duradero a quienes sufren de fibromialgia y dolor crónico.
Además, la acupuntura puede influir positivamente en la forma en que el cerebro y el cuerpo procesan las señales de dolor. Al estimular ciertos puntos, modificamos la manera en que el sistema nervioso central percibe el dolor, reduciendo su intensidad y ayudando a normalizar la sensibilidad.
